Los vecinos alertan de la inseguridad en Bixquert y demandan patrullas policiales

S. G. XÀTIVA No hay tiempo que perder. La asociación de vecinos de Bixquert ha trasladado al alcalde de Xàtiva, Roger Cerdà, un listado con las numerosas demandas que el colectivo arrastra desde hace años, incluyendo las promesas incumplidas de la anterior corporación en materia de señalización y acondicionamiento de vías: actuaciones consideradas prioritarias y urgentes en el diseminado. Del estudio urbanístico de carencias y deficiencias que en 2012 los residentes entregaron al consistorio, solo un 15% han obtenido respuesta.

Los representantes de la asociación se han reunido en lo que va de mes en dos ocasiones con el equipo de gobierno. El pasado jueves plantearon alcalde la preocupación respecto a la inseguridad en el área residencial, agravada cuando, en verano, la población de Bixquert se dispara. Aunque la zona dispone de un retén, el colectivo sostiene que la presencia de la policía local es testimonial y «poco habitual», por lo que piden a la corporación no solo más agentes, sino que se organicen patrullas que ofrezcan «mayor seguridad» al vecindario frente a asaltos y hurtos, pero también respecto a otra problemática vinculada a los numerosos propietarios que incumplen sistemáticamente la ordenanza de animales domésticos en el diseminado.

Los residentes denunciaron la semana pasada a la Policía diversos incidentes protagonizados por perros peligrosos que vagan sueltos por las inmediaciones de los chalés y que a punto estuvieron de terminar en agresiones a viandantes, en puntos como el camino de la Cova Negra o la Font Quintana. La asociación se queja del «descontrol» y reclama que se persiga a los infractores como en el núcleo urbano. «La gente se siente intimidada. Parece que aquí no hay reglas: pero la ordenanza es para todo el término municipal». Javier Pardo, presidente del colectivo, advierte del peligro y expone que muchos perros que residen en las urbanizaciones no están registrados. Otro problema que urge a atajar cuanto antes, con labores de concienciación que impliquen controles y sanciones. «Si escapan, no se puede localizar a sus dueños porque no están identificados y acaban en la perrera. La irresponsabilidad la termina pagando el animal», subraya Pardo.

Falta de medios policiales

El alcalde se ha comprometido a estudiar soluciones y ha manifestado la voluntad del equipo de gobierno de solventar las carencias en Bixquert, incluyendo la presencia policial, una demanda que choca con la falta de medios que padece el consistorio y que afecta también al núcleo urbano.